Colombia destina menos del 1% del PIB para innovar en la industria farmacéutica
Bogotá, 29 de noviembre 2022. El precio en los insumos de los medicamentos importados después de la pandemia es 8 veces más alto en comparación con los precios de la industria local según un informe de la Asociación Colombiana de la Industria Farmacéutica (ASCIF), debido a la dependencia de los insumos importados.
Una situación que afecta a los bolsillos de los usuarios en un país como Colombia con potencial en innovación de medicamentos, pero en el que se destina menos del 1% del PIB para la investigación y desarrollo de la industria farmacéutica.
“Es preocupante que Colombia haya registrado un promedio de inversión del 0,3 por ciento del PIB en investigación y desarrollo según datos del Banco Mundial. Además, el 34% de los colombianos no reciben medicamentos prescritos y 7 de cada 10 medicamentos que se comercializan son importados”, aseguró el senador Pedro Flórez Porras, quien hace parte de la bancada de Gobierno y ha encaminado esfuerzos para que desde el Congreso se debata esta problemática.
Con el fin de que lleguen más recursos a la investigación científica y el desarrollo de la industria farmacéutica, el Senador Flórez radicó el proyecto de Ley 092 de 2022, que hoy cursó su primer debate en Comisión VI del Senado.
“Desde la pandemia el país ha evidenciado la necesidad de tener autonomía sanitaria. Luego de la angustiosa espera por las vacunas, los colombianos sentimos impotencia con el desabastecimiento de medicamentos. Hoy, debemos reconocer al sector industrial farmacéutico como estratégico para el desarrollo en esta materia”, dijo el congresista en el debate.
El proyecto de Ley busca generar herramientas para la articulación de la academia y la industria farmacéutica. También pretende resolver el desabastecimiento, la escasez de medicamentos esenciales, la baja producción local, la baja inversión en tecnologías sanitarias, entre otros.
Al finalizar, el Congresista manifestó que debe ser una prioridad promover y fortalecer la investigación científica, el desarrollo tecnológico, la innovación y producción que permitan asegurar la disponibilidad de medicamentos y otros bienes productivos que cumplan con los estándares que los colombianos merecen en calidad, seguridad y eficacia, pero que, sean fabricados y comercializados en el país.